Mi nombre es Hans-Wolff Graf y soy alemán, pero ante todo, soy un ser humano que desea organizar su vida en este mundo con interés, curiosidad y alegría – en paz con sus prójimos, independiente del color de su piel, de su origen, nacionalidad y sexo.
No puede ser que políticos con delirios de grandeza, consorcios con afán lucrativo, militares enfermos y fanáticos religiosos locos se tomen el derecho para impedírmelo.
Básicamente, rechazo toda forma de violencia, intolerancia o marginación y ayudaré a cualquiera que se vea afectado por estas. Los políticos están atrapados dentro del sistema de carrera propio de sus partidos – no pueden modificar nada, salvo intentar imponer a otros su visión sistemática.
¡NOSOTROS podemos modificar algo si estamos dispuestos a hacerlo, si realmente lo deseamos!
Debemos ser un ejemplo para nuestros hijos, porque NOSOTROS respondemos por su futuro.